Suena mi
despertador, ese atormentador sonido que me hace imposible seguir con mi sueño,
tengo que estirar mi brazo lo más que pueda hacia esa maldita computadora que me impide soñar una vez más; inmediatamente tomo mi celular ya resignada a que
no podré dormir más y veo las nuevas actualizaciones de estados de mis
contactos, contesto alguno que otro mensaje y me decido por levantarme de la
cama.
En la cocina
me encuentro con una tercera computadora, el bendito microondas, en mi
religión quizá me castigarían por bendecir un aparato, pero ¿de qué otra manera
conseguiría calentar mi comida en menos de 30 segundos? Es casi mágico. Ya una
vez desayunada tomo mi camino a la escuela, claro esperando las 2 canciones que
tarda mi carro en calentarse para poder avanzar.
En la escuela interactúo a veces más con mi celular que con mis compañeros de clase, quizá porque todos son nuevos para mí o porque lo que hay en esta pequeña computadora me es más interesante que las etapas de la vida que nos van formando en nuestro temperamento y carácter a través de lo que vamos viviendo y experimentando.
En mi siguiente clase de vez en cuando utilizamos computadoras de escritorio para hacer trabajos como de este tipo, donde terminaremos subiendo al blog lo concluido para tener algún tipo de evidencia de que no sólo estamos por los créditos que nos brinda la clase a nuestro expediente académico.
Al terminar la clase, me vuelvo a subir a mi computadora de cuatro llantas y me voy camino a casa, al llegar de vez en cuando utilizo un poco la televisión para ver algún capítulo de una serie sarcástica, reír un poco y después tomar mi laptop para estudiar farmacología, mañana tengo un examen importante sobre esa materia y tengo que estar preparada.
Realmente antes de ir a dormir vuelvo a utilizar mi celular donde termino preguntándome si las computadoras están en mi vida o acaso ¿mi vida está en las computadoras?
Hola Ericka,
ResponderEliminarBuena reflexión sobre la interacción que tienes a diario con estos dispositivos que cada vez nos invaden más. Con la conclusión que añades al final me hace recordar a quellas películas en donde las computadoras controlan nuestras vidas. Saludos !!